Sabemos que a muchas nos encantan los bolsos… vamos a algún almacén o los vemos por internet y cuando hay uno que nos gusta hacemos todo por comprarlo… somos conscientes que podemos tener una colección tan grande como nuestro closet lo permita o sencillamente, si este lugar ya está lleno, invadimos otros espacios de la casa a la hora de guardarlos. Sin embargo, cuando queremos encontrar ese pequeño bolso rojo para salir un sábado en la noche desbaratamos todo el closet y los demás espacios invadidos y sólo después de 20 minutos encontramos el que queremos, o simplemente nos rendimos en la mitad del camino y escogemos entre el que usamos el día anterior o el primero que veamos, todo con tal de no entrar en ese agujero negro.
Por lo general, los tenemos organizados como si fueran costales, unos encima de otros… sin saber en qué parte de la pila se encuentra el que queremos usar ese día y el pobre que esta de último sufre las consecuencias porque ni se ve, está lleno de polvo y, además, es el más olvidado de todos, nunca lo usamos.
Uno de los retos al organizar el closet es darle un lugar exclusivo a todas las cosas que usas y te hacen feliz… en mi caso, y en el de varias de mis clientas, los bolsos ocupan un espacio especial en el día a día. Por eso, creo que debemos organizarlos de forma tal que los encontremos en menos de 30 segundos, manteniendo un sistema de clasificación por categorías y siendo conscientes de deshacernos de los que ya no queremos o no usemos en más de 6 meses.
De los bolsos en el closet, encuentra el que quieres usar en menos de 30 segundos…
Sería un hit buscar y encontrar súper rápido el bolso que tanto quieres usar ese día, verdad? Pues te diré que es cuestión de:
- Tener tus bolsos en un mismo espacio: porque así sabrás que no están en otro closet o en otro lugar de la casa; no tendrás que correr hasta el otro extremo sólo para ver si de casualidad está allá el que buscas. Recuerda: Todos en el mismo lugar te ahorrarás un tiempo extra buscando dónde no sabes si estará.
- Guárdalos tipo archivo o librero: si los tienes en un cajón o debajo de la cama, los ubicas tipo archivo, uno al lado del otro, o si los tienes en algún entrepaño del closet ponlos como si fueran libros en una biblioteca, no es conveniente ponerlos uno encima del otro. De esta manera podrás encontrar fácilmente el que buscas porque tendrás una vista panorámica de todo tu inventario. Si tienes un espacio disponible detrás de la puerta del closet o cuarto también los puedes acomodar ahí, colgados de forma vertical para aprovechar cada centímetro, pero no pongas uno encima del otro, acuérdate.
- No meterlos en bolsas o cajas: no los podrás ver y será mas difícil de identificar dónde están. Sé que muchas guardamos la bolsa del almacén donde lo compramos para protegerlo del polvo, pero lo más efectivo para mantenerlos bien cuidados es usándolos con frecuencia, así el polvo no se les adhiere y estarán en su estado natural: colgados en tu hombro.
- Organizarlos por categorías: Si tienes bolsos tipo clutch, tipo backpack, para la fiestas, grandes, medianos o de paseo (tipo playero), así deben estar distribuidos en el espacio. Debes agruparlos por estas categorías y lo más aconsejable es que etiquetes ese grupo de bolsos poniendo un sticker en el entrepaño o cajón que diga el nombre de la categoría, así una vez lo saques ya sabes el grupo al que pertenece para volverlo a su lugar.
- Descartar conscientemente los que ya no usas: es complicado deshacerse de un bolso, lo sé, pero tenemos que ser realistas, hay uno que otro que ya no usamos y cuando lo encontramos queremos darle una treceava oportunidad y nos vemos al espejo y simplemente no nos hace feliz, no nos sentimos cómodas con el, ya sea porque lo usamos tanto que ya no lo queremos ver, o porque está dañado o porque en realidad no es nuestro estilo. Hazle un diagnóstico completo, pregúntate: ¿Hace cuánto lo tengo?, ¿Hace cuánto no lo uso?, ¿Me hace feliz?, ¿Tengo uno similar que uso con mayor frecuencia?, ¿Si no lo uso hace x meses, por qué lo voy a extrañar?, ¿Crees que alguien más podría usarlo y ser feliz con el? Después de responder estas preguntas ya sabrás qué hacer, si no lo quieres ni lo usas ¿para qué lo tienes? Lo mejor es darle una oportunidad fuera de tu closet, hay personas que podrían disfrutarlo más que tú, y para eso tienes varias opciones: donarlo, venderlo o regalarlo.
Una vez hayas pasado por estos 5 pasos sentirás que tu espacio está organizado y optimizado, con un sistema de orden adecuado a tus rutinas, etiquetado y libre de cosas que no te gustan ni usas. Verás que ese agujero negro que te causaba estrés con solo mirarlo, es ahora un lugar especial donde descansan tus bolsos, tu día a día será más fácil de vivir y las largas jornadas de búsqueda del bolso ideal no existirán más en tu vida.